16 de diciembre de 2010

LOS REYES MAGOS SI EXISTEN

Apenas su padre se había sentado al llegar a casa, dispuesto a escucharle como todos los días lo que su hija le contaba de sus actividades en el colegio, cuando ésta en voz algo baja, como con miedo, le dijo:
- ¿Papa?
- Sí, hija, cuéntame
- Oye, quiero... que me digas la verdad
- Claro, hija. Siempre te la digo -respondió el padre un poco sorprendido
- Es que... -titubeó Blanca
- Dime, hija, dime.
- Papá, ¿existen los Reyes Magos?
El padre de Blanca se quedó mudo, miró a su mujer, intentando descubrir el origen de aquella pregunta, pero sólo pudo ver un rostro tan sorprendido como el suyo que le miraba igualmente.
- Las niñas dicen que son los padres. ¿Es verdad?
La pregunta de Blanca le obligó a mirar a la niña y tragando saliva le dijo:
- ¿Y tú qué crees, hija?
- Yo no se, papá: que sí y que no. Por un lado me parece que sí que existen porque tú no me engañas; pero, como las niñas dicen eso.
- Mira, hija, efectivamente son los padres los que ponen los regalos, pero...
- ¿Entonces es verdad? -cortó la niña con los ojos humedecidos-. ¡Me habéis engañado!
- No, mira, nunca te hemos engañado porque los Reyes Magos sí que existen -respondió el padre cogiendo con sus dos manos la cara de Blanca .
- Entonces no lo entiendo. papá.
- Siéntate, Blanquita, y escucha esta historia que te voy a contar porque ya ha llegado la hora de que puedas comprenderla -dijo el padre, mientras señalaba con la mano el asiento a su lado.
Blanca se sentó entre sus padres ansiosa de escuchar cualquier cosa que le sacase de su duda, y su padre se dispuso a narrar lo que para él debió de ser la verdadera historia de los Reyes Magos:
- Cuando el Niño Jesus nació, tres Reyes que venían de Oriente guiados por una gran estrella se acercaron al Portal para adorarle. Le llevaron regalos en prueba de amor y respeto, y el Niño se puso tan contento y parecía tan feliz que el más anciano de los Reyes, Melchor, dijo:
-¡Es maravilloso ver tan feliz a un niño! Deberíamos llevar regalos a todos los niños del mundo y ver lo felices que serían.
- ¡Oh, sí! -exclamó Gaspar-. Es una buena idea, pero es muy difícil de hacer. No seremos capaces de poder llevar regalos a tantos millones de niños como hay en el mundo.
Baltasar, el tercero de los Reyes, que estaba escuchando a sus dos compañeros con cara de alegría, comentó:
- Es verdad que sería fantástico, pero Gaspar tiene razón y, aunque somos magos, ya somos ancianos y nos resultaría muy difícil poder recorrer el mundo entero entregando regalos a todos los niños. Pero sería tan bonito.
Los tres Reyes se pusieron muy tristes al pensar que no podrían realizar su deseo. Y el Niño Jesús, que desde su pobre cunita parecía escucharles muy atento, sonrió y la voz de Dios se escuchó en el Portal:
- Sois muy buenos, queridos Reyes Magos, y os agradezco vuestros regalos. Voy a ayudaros a realizar vuestro hermoso deseo. Decidme: ¿qué necesitáis para poder llevar regalos a todos los niños?
- ¡Oh, Señor! -dijeron los tres Reyes postrándose de rodillas. Necesitaríamos millones y millones de pajes, casi uno para cada niño que pudieran llevar al mismo tiempo a cada casa nuestros regalos, pero. no podemos tener tantos pajes., no existen tantos.
- No os preocupéis por eso -dijo Dios-. Yo os voy a dar, no uno sino dos pajes para cada niño que hay en el mundo.
- ¡Sería fantástico! Pero, ¿cómo es posible? -dijeron a la vez los tres Reyes Magos con cara de sorpresa y admiración.
- Decidme, ¿no es verdad que los pajes que os gustaría tener deben querer mucho a los niños? -preguntó Dios.
- Sí, claro, eso es fundamental - asistieron los tres Reyes.
- Y, ¿verdad que esos pajes deberían conocer muy bien los deseos de los niños?
- Sí, sí. Eso es lo que exigiríamos a un paje -respondieron cada vez más entusiasmados los tres.
- Pues decidme, queridos Reyes: ¿hay alguien que quiera más a los niños y los conozca mejor que sus propios padres?
Los tres Reyes se miraron asintiendo y empezando a comprender lo que Dios estaba planeando, cuando la voz de nuevo se volvió a oír:
- Puesto que así lo habéis querido y para que en nombre de los Tres Reyes Magos de Oriente todos los niños del mundo reciban algunos regalos, YO, ordeno que en Navidad, conmemorando estos momentos, todos los padres se conviertan en vuestros pajes, y que en vuestro nombre, y de vuestra parte regalen a sus hijos los regalos que deseen. También ordeno que, mientras los niños sean pequeños, la entrega de regalos se haga como si la hicieran los propios Reyes Magos. Pero cuando los niños sean suficientemente mayores para entender esto, los padres les contarán esta historia y a partir de entonces, en todas las Navidades, los niños harán también regalos a sus padres en prueba de cariño. Y, alrededor del Belén, recordarán que gracias a los Tres Reyes Magos todos son más felices.
Cuando el padre de Blanca hubo terminado de contar esta historia, la niña se levantó y dando un beso a sus padres dijo:
- Ahora sí que lo entiendo todo papá.. Y estoy muy contenta de saber que me queréis y que no me habéis engañado.
Y corriendo, se dirigió a su cuarto, regresando con su hucha en la mano mientras decía:
- No sé si tendré bastante para compraros algún regalo, pero para el año que viene ya guardaré más dinero.
Y todos se abrazaron mientras, a buen seguro, desde el Cielo, tres Reyes Magos contemplaban la escena tremendamente satisfechos.

El origen de las Palabras: "Arzobispo"

Siempre me ha sorprendido la genesis de alguno de los vocablos que a diario utilizamos, intentando explicar alguno de estos origenes me ha topado con la palabra "Arzobispo", emparentada con "microscopio" y con "archipielago".. ¿ quien lo diria, eh?

" Con la llegada al poder de Constantino como emperador romano de Bizancio (306 d. de C.), la Iglesia católica, hasta entonces perseguida, se convirtió en la religión del poder y, como tal, se vio obligada a estructurar una jerarquía más formal de la establecida hasta entonces. Como consecuencia de ese proceso, aparecieron los primeros obispos con ese nombre en las cinco diócesis de la cristiandad: Roma, Antioquía, Alejandría, Jerusalén y Constantinopla, en el siglo VI, doscientos años después de Constantino.

El nombre de este cargo fue tomado del griego episkopos, palabra formada con el prefijo epi- 'sobre', 'encima de' y skopos 'ver', 'mirar', 'inspeccionar', o sea, 'inspector que está por encima, en una posición superior', 'supervisor'. Skopos está presente en nuestra lengua en palabras como telescopio, microscopio, oftalmoscopio.

Más adelante, con el crecimiento de la Iglesia, algunos obispos asumieron posiciones más altas aún, eran los arkhiepiskopos, algo así como 'obispos jefe', una palabra que llegó al latín medieval como archiepiscopus y al castellano como arzobispo. Arkhi-, formado a partir de arkhein 'ser el primero, el superior', también está presente en numerosos vocablos españoles, como archipiélago, archiduque, monarquía, oligarquía, anarquía y también arquidiócesis la jurisdicción del arzobispo ".


http://www.elcastellano.org/palabra.php

15 de diciembre de 2010

MONCLOA PALACE (2)... jajaja

DE LA VEGA AUN MAS FEA..


MINISTRO DE SECUESTROS


AND THE ZAPATERO GOES TO...


HASTA LA DERROTA SIEMPRE


HABLANDO SE ENTIENDE LA GENTE


DAME UN LEURO, SARKOSY

MONCLOA PALACE (1)... jajajja

ZAPATERO EN 3D


MINISTRA CACHONDA


ADIOS MARIA TERESA


ZP MENSAJERO DEL FUTURO


OBAMA ME PONE


NO SIN MIS HIJAS

14 de diciembre de 2010

NO ES UN CHISTE DE GANDIA, AUNQUE LO PAREZCA

Pongámonos en antecedentes: en un TAC para diagnosticar un quiste en el seno maxilofacial al enfermo le descubren una mancha en la arteria cerebral; como tiene antecedentes familiares de aneurismas en ese lugar, se le indica que debe someterse a una angiografía, tras ello, tres meses después es citado para darle los resultados.
La consulta transcurre así:

Paciente: Buenos Días
Doctor: Buenos días, siéntese.
Do.- Vamos a ver, ¿ que tal se encuentra ?
Pa.- Bien, me encuentro bien.
Do.- Verá, no hemos podido localizar su expediente, pero no hay problema por ello.
¿ ha sufrido algún otro episodio ?
Pa.- ¿ Episodio de qué, doctor ?, nunca he sufrido episodios.
Doctor mira ordenador y pone cara de !! ufff, metí la pata !!
Do.- Pero a usted le han hecho una angiografía cerebral...
Pa.- Si, salio una mancha en un TAC y como tengo antecedentes familiares, usted me recomendó esa prueba..
Do.- Bien, bien...
Doctor remira la pantalla del ordenador y mira a la enfermera, mira al paciente, la enfermera mira al paciente, el paciente al doctor....
Do.- ¿ le dijeron algo tras la angiografía ?
Pa.- Si, me dijo el cirujano que no había encontrado ningún aneurisma.
Do.- Muy bien, muy bien - la cara del doctor se relaja - Entonces, si mi colega le ha indicado que no hay aneurisma y tres meses después está usted aquí con tan buena cara... debemos concluir que usted no está enfermo ( aquí la cara del doctor raya el delirio, acaba de descubrir la penicilina )
Pa.- No se, el profesional es usted...
La enfermera, en un gesto curioso se da media vuelta, no puede aguantar la sonrisa que dice " chaval, te la están colando, sin expediente no se puede diagnosticar..."
Do.- Mire, para que usted no se lleve la equivocada impresión de que no nos preocupamos de su salud, voy a indicar que dentro de un año pase una revisión, le citarán por carta.
Pa.- Doctor, ¿ una revisión de que ?
Do.- Del aneurisma, claro, del aneurisma.
El doctor mira la pantalla, mira al paciente, la enfermera no se atreve a volverse..
Pa.- Pero doctor, si me ha dicho que no tengo nada...
Do.- Pero es mejor prevenir que curar, ¿ no cree ?
Pa.- ¿ entonces... me harán otro cateterismo el año que viene ?
Do.- Noooo, no hombre, sera una revisión con pruebas diagnósticas
Pa.- ¿ y el cateterismo que es ?
Do.- Una prueba diagnóstica ( aquí el doctor se queda con cara confundida, la enfermera sale de la sala, se supone que a descojonarse sin que se le vea )
Pa.- Ahh, vale ( aquí el paciente tiene cara de " no entiendo nada " )
Do.- pues nada, nos vemos dentro de un año... ahhh, mire, lo único que hemos recuperado de su expediente son las pegatinas, si hace el favor de llevárselas...
Pa.- ¿ y yo para que quiero esto ?
Do.- No, para nada, pero mejor se las lleva, no vaya a ser que se traspapelen y etiqueten erróneamente otro expediente..

El paciente sale de la sala con la sensación de que se la han metido doblada, se cruza con la enfermera que tiene una sonrisa en la cara, esa sonrisa que dice " chaval, que estómago tienes, como te la has comido sin rechistar "

Esto ha pasado hace menos de dos horas, unidad de neuro-cirugía de Sevilla, el paciente se llama Nicolás Contreras, el que suscribe....

10 de diciembre de 2010

CLASES MEDIAS ( Pérez Reverte )

Cada vez que doy un paseo veo más tiendas cerradas. Algunas, las de toda la vida, habían sobrevivido a guerras y conmociones diversas. Eran parte del paisaje. De pronto, el escaparate vacío, el rótulo desaparecido de la fachada, me dejan aturdido, como ocurre con las muertes súbitas o las desgracias inesperadas. Es una sensación de pérdida irreparable , aunque sólo haya echado vistazos al escaparate, sin entrar nunca. Otras de esas tiendas son negocios recientes: comercios abiertos hace un par de años, e incluso pocos meses; primero, los trabajos que precedían a la apertura, y después la inauguración, todo flamante, dueños y dependientes a la expectativa, esperanzados. Ahora paso por delante y advierto que los cristales están cubiertos y la puerta cerrada. Y me estremezco contagiado de la desilusión, la derrota que trasmite ese triste cartel pegado al cristal con las palabras se alquila o se traspasa.

En lo que va de año, la relación es como de una lista de bajas después de un combate sangriento . Entre las que conozco hay una parafarmacia, dos tiendas de complementos, una de música clásica, una estupenda tienda de vinos, una ferretería, una tienda de historietas, tres de regalos, dos de muebles, cuatro anticuarios, una librería, dos buenas panaderías, una galería de arte, una sombrerería, una mercería e innumerables tiendas de ropa. También -ésa fue un golpe duro, por lo simbólico- una juguetería grande y bien surtida . Me gustaba entrar en ella, recobrando la vieja sensación que, quienes fuimos niños cuando no había televisión, ni videoconsola, ni nos habíamos vuelto todos -críos incluidos- completamente cibergilipollas, conservamos del tiempo en que una juguetería con sus muñecas, trenes, soldados, escopetas, cocinitas, caballos de cartón, disfraces de torero y juegos reunidos Geyper, era el lugar más fascinante del mundo.

Ahora hablamos de crisis cada día. Hasta los putos políticos y las putas políticas, que no es lo mismo que políticas putas, ahórrenme las putas cartas, lo hacen con la misma impavidez con que antes afirmaban lo contrario. En todo caso, una cosa es manejar estadísticas; y otra, pisar la calle y haber conocido esas tiendas una por una, recordando los rostros de propietarios y dependientes, su desasosiego en los últimos tiempos , la esperanza, menor cada día, de que alguien se parase ante el escaparate, se animara y entrase a comprar, sabiendo que de ese acto dependían el bienestar, el futuro, la familia . Haber presenciado tanta angustia diaria , la ausencia de clientes , el miedo a que tal o cual crédito no llegara, o a no tener con qué pagarlo. El saberse condenados y sin esperanza mientras, en las tiendas desiertas que con tanta ilusión abrieron, languidecían su trabajo y sus ahorros. Morían tantos sueños..

Eso es lo peor, a mi juicio... Lo imperdonable. Todas esas ilusiones deshechas, trituradas por políticos golfos y sindicalistas sobornados que todavía hablan de clase empresarial como si todos los empresarios españoles tuvieran yate en Cerdeña y cuenta en las islas Caimán. Ignorando las ilusiones deshechas tanta gente con ideas y fuerza, que arriesgó, peleó para salir adelante, y se vio arrastrada sin remedio por la tragedia económica de los últimos tiempos y también por la irresponsabilidad criminal de quienes tuvieron la obligación de prevenirlo y no quisieron , y ahora tienen el deber de solucionarlo, pero ni pueden ni saben . De esa gentuza encantada consigo misma que no sólo carece de eficacia y voluntad, sino que sigue impasible como don Tancredo, procurando ni parpadear ante los cuernos del toro que corretea llevándose a todo cristo por delante. Un Gobierno cínico, demagogo, embustero hasta el disparate . Sentenciándonos, entre unos y otros, a ser un país sin tejido industrial ni empresarial, sin clase media, condenado al dinero negro, al subsidio laboral con trabajo paralelo encubierto y a la economía clandestina . Con mucho Berlusconi en el horizonte. Un rebaño analfabeto, sumiso, de albañiles, putas y camareros , donde los únicos que de verdad van a estar a gusto, sinvergüenzas aparte, serán los jubilados guiris, los mafiosos nacionales e importados, y los hooligans de viaje y tres noches de hotel, borrachera y vómito incluidos, por veinticinco euros. Para entonces, los responsables del desastre se habrán retirado confortablemente al cobijo de sus partidos, de sus varios sueldos oficiales, de sus pingües jubilaciones por los servicios prestados a sí mismos . A dar conferencias a Nueva York sobre cómo nos reventaron a todos, dejando el paisaje lleno de tiendas cerradas y de vidas con el rótulo se traspasa . Así que malditos sean su sangre y todos sus muertos . En otros tiempos, al menos tenías la esperanza de verlos colgados de una farola